La Cofradía de Nuestro padre Jesús Nazareno y María Santísima de los Dolores de Cádiz procesiona por la ciudad en la tarde noche del Jueves Santo desde 1869. Anteriormente a la fecha esta tenía lugar en la madrugada del Viernes Santo, siendo el cambio de fecha motivado por una decisión del Obispo Fray Félix en dicho año, y que ha permanecido hasta nuestros días.
La procesión de la cofradía esta compuesta por dos pasos, el primero con la imagen de Jesús Nazareno acompañado por Santa María Magdalena, y el segundo con la de María Santísima de los Dolores bajo palio de malla y bordados de oro. Ambos pasos van llevados por cargadores, hermanos de la cofradía, que van bajo los mismos cargando sobre el hombro, quedando en el exterior un grupo de manigueteros (cuatro en el caso del paso de Jesús y seis en el de la Virgen) que marcan el compás con las horquillas.
El orden procesional está compuesto por un cuerpo de penitentes con capirote y túnica morado con capas de color blanco para las secciones de Cristo, y capirote y capa negra con túnica color rojo oscuro para las de la Virgen de los Dolores. En ambas secciones las capas llevan la Santa Cruz de Jerusalén en color rojo.
El recorrido de la procesión de algo más de diez horas resulta de gran fervor y devoción resultando especialmente interesante el recorrido de la procesión por las calles Sopranis y Botica, por las que pasa ya de regreso a su templo, por ser el camino que recorre a la vuelta a su barrio en la ya casi mañana del Viernes Santo. Es en esta parte, al igual que ocurre a la salida y en general por todas las calles del Barrio, donde se demuestra en su mayor expresión el fervor del Barrio de Santa María y del pueblo gaditano en general, hacia el Nazareno y su Bendita Madre de los Dolores.
Cargado va de coronas
el paso del Nazareno
que le ofrendaron sus fieles
lleno de místico anhelo.
Entre luces y entre flores
y entre Cofrades severos
que llevan oculto el rostro,
y caminan con misterio,
torna en la noche del Jueves
a las naves de su Templo.
Plaza de Santa María.
Cómo hierven en tu seno
las músicas y los llantos,
clamores, suspiros, rezos,
cuando la Imagen sagrada
es vuelta cara al pueblo.
Tibia y clara está la nocheparpadean los luceros,
y ya de la gran entrada
traspone el lóbrego hueco
majestuoso y sublime,
el paso del Nazareno;
cuando la voz argentina,
cuando el delicioso acento
de una muchacha del barrio
domina el tumulto inmenso
y entona tierna saeta
en cuyos dolientes ecos
parecen temblar las lágrimas
como estrellas en el Cielo,
como rocío en las hojas;
y a todos deja suspensos
con la canción peregrina,
de esta manera diciendo:
“Más tarde volveré yo
y te sacaré escondío
dentro de mi corazón.”
el paso del Nazareno
que le ofrendaron sus fieles
lleno de místico anhelo.
Entre luces y entre flores
y entre Cofrades severos
que llevan oculto el rostro,
y caminan con misterio,
torna en la noche del Jueves
a las naves de su Templo.
Plaza de Santa María.
Cómo hierven en tu seno
las músicas y los llantos,
clamores, suspiros, rezos,
cuando la Imagen sagrada
es vuelta cara al pueblo.
Tibia y clara está la nocheparpadean los luceros,
y ya de la gran entrada
traspone el lóbrego hueco
majestuoso y sublime,
el paso del Nazareno;
cuando la voz argentina,
cuando el delicioso acento
de una muchacha del barrio
domina el tumulto inmenso
y entona tierna saeta
en cuyos dolientes ecos
parecen temblar las lágrimas
como estrellas en el Cielo,
como rocío en las hojas;
y a todos deja suspensos
con la canción peregrina,
de esta manera diciendo:
“Más tarde volveré yo
y te sacaré escondío
dentro de mi corazón.”
FUENTES:
YOUTUBE
WEB usuarios.multimania.es/nazareno_cadiz/
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